Descubre tantas curiosidades como puedas

    El artículo ha sido añadido.

    ¡Obtén un 20% de descuento!arrow_drop_up

    1 Reyes 10

    • calendar_today
    • comment {0 comentarios

    La reina de Sabá visita a Salomón

    1 Oyendo la reina de Sabá la fama que Salomón había alcanzado por el nombre de Jehová, vino a probarle con preguntas difíciles. 2 Y vino a Jerusalén con un séquito muy grande, con camellos cargados de especias, y oro en gran abundancia, y piedras preciosas; y cuando vino a Salomón, le expuso todo lo que en su corazón tenía. 3 Y Salomón le contestó todas sus preguntas, y nada hubo que el rey no le contestase. 4 Y cuando la reina de Sabá vio toda la sabiduría de Salomón, y la casa que había edificado, 5 asimismo la comida de su mesa, las habitaciones de sus oficiales, el estado y los vestidos de los que le servían, sus maestresalas, y sus holocaustos que ofrecía en la casa de Jehová, se quedó asombrada.

    6 Y dijo al rey: Verdad es lo que oí en mi tierra de tus cosas y de tu sabiduría; 7 pero yo no lo creía, hasta que he venido, y mis ojos han visto que ni aun se me dijo la mitad; es mayor tu sabiduría y bien, que la fama que yo había oído. 8 Bienaventurados tus hombres, dichosos estos tus siervos, que están continuamente delante de ti, y oyen tu sabiduría. 9 Jehová tu Dios sea bendito, que se agradó de ti para ponerte en el trono de Israel; porque Jehová ha amado siempre a Israel, te ha puesto por rey, para que hagas derecho y justicia. 10 Y dio ella al rey ciento veinte talentos de oro, y mucha especiería, y piedras preciosas; nunca vino tan gran cantidad de especias, como la reina de Sabá dio al rey Salomón.

    11 La flota de Hiram que había traído el oro de Ofir, traía también de Ofir mucha madera de sándalo, y piedras preciosas. 12 Y de la madera de sándalo hizo el rey balaustres para la casa de Jehová y para las casas reales, arpas también y salterios para los cantores; nunca vino semejante madera de sándalo, ni se ha visto hasta hoy. 13 Y el rey Salomón dio a la reina de Sabá todo lo que ella quiso, y todo lo que pidió, además de lo que Salomón le dio. Y ella se volvió, y se fue a su tierra con sus criados.

    Riquezas y fama de Salomón

    14 El peso del oro que Salomón tenía de renta cada año, era seiscientos sesenta y seis talentos de oro; 15 sin lo de los mercaderes, y lo de la contratación de especias, y lo de todos los reyes de Arabia, y de los principales de la tierra. 16 Hizo también el rey Salomón doscientos escudos grandes de oro batido; seiscientos siclos de oro gastó en cada escudo. 17 Asimismo hizo trescientos escudos de oro batido, en cada uno de los cuales gastó tres libras de oro; y el rey los puso en la casa del bosque del Líbano. 18 Hizo también el rey un gran trono de marfil, el cual cubrió de oro purísimo. 19 Seis gradas tenía el trono, y la parte alta era redonda por el respaldo; y a uno y otro lado tenía brazos cerca del asiento, junto a los cuales estaban colocados dos leones. 20 Estaban también doce leones puestos allí sobre las seis gradas, de un lado y de otro; en ningún otro reino se había hecho trono semejante.

    21 Y todos los vasos de beber del rey Salomón eran de oro, y asimismo toda la vajilla de la casa del bosque del Líbano era de oro fino; nada de plata, porque en tiempo de Salomón no era apreciada. 22 Porque el rey tenía en el mar una flota de naves de Tarsis, con la flota de Hiram. Una vez cada tres años venía la flota de Tarsis, y traía oro, plata, marfil, monos y pavos reales. 23 Así excedía el rey Salomón a todos los reyes de la tierra en riquezas y en sabiduría. 24 Toda la tierra procuraba ver la cara de Salomón, para oír la sabiduría que Dios había puesto en su corazón. 25 Y todos le llevaban cada año sus presentes: alhajas de oro y de plata, vestidos, armas, especias aromáticas, caballos y mulos.

    Salomón comercia en caballos y en carros

    26 Y juntó Salomón carros y gente de a caballo; y tenía mil cuatrocientos carros, y doce mil jinetes, los cuales puso en las ciudades de los carros, y con el rey en Jerusalén. 27 E hizo el rey que en Jerusalén la plata llegara a ser como piedras, y los cedros como cabrahígos de la Sefela en abundancia. 28 Y traían de Egipto caballos y lienzos a Salomón; porque la compañía de los mercaderes del rey compraba caballos y lienzos. 29 Y venía y salía de Egipto, el carro por seiscientas piezas de plata, y el caballo por ciento cincuenta; y así los adquirían por mano de ellos todos los reyes de los heteos, y de Siria.

    Versículos más Leídos de 1 Reyes 10

    1 Reyes 10:1
    "Oyendo la reina de Sabá la fama que Salomón había alcanzado por el nombre de Jehová, vino a probarle con preguntas difíciles."

    1 Reyes 10:4-5
    "Y cuando la reina de Sabá vio toda la sabiduría de Salomón, y la casa que había edificado, asimismo la comida de su mesa, las habitaciones de sus oficiales... se quedó asombrada."

    1 Reyes 10:7
    "Pero yo no lo creía, hasta que he venido, y mis ojos han visto que ni aun se me dijo la mitad; es mayor tu sabiduría y bien, que la fama que yo había oído."

    1 Reyes 10:9
    "Jehová tu Dios sea bendito, que se agradó de ti para ponerte en el trono de Israel; porque Jehová ha amado siempre a Israel, te ha puesto por rey, para que hagas derecho y justicia."

    El significado de 1 Reyes 10

    Este pasaje destaca el impacto de la sabiduría y la grandeza de Salomón, tanto a nivel nacional como internacional. La visita de la reina de Sabá, quien vino de una tierra lejana, muestra que la fama del rey había trascendido las fronteras de Israel. Su llegada con grandes riquezas simboliza el respeto y la admiración por el gobierno justo de Salomón, algo atribuido al favor de Dios.

    La reina, al ver la sabiduría y prosperidad del reino, reconoce que todo proviene de Dios, confirmando el rol de Salomón como un rey justo y sabio, bendecido para guiar a Israel en justicia. Este relato también pone de relieve la importancia de la bendición divina sobre el liderazgo, y la conexión entre la sabiduría y la piedad en la prosperidad de un reino.

    En un sentido más profundo, el relato muestra que la verdadera sabiduría y justicia provienen de Dios, y aquellos que caminan en sus caminos, como Salomón en este punto de su reinado, son capaces de reflejar esa sabiduría a los demás.

    Preguntas frecuentes de 1 Reyes 10

    1. ¿Qué simboliza la visita de la reina de Sabá?
    La visita simboliza el reconocimiento internacional de la sabiduría de Salomón y la bendición de Dios sobre su reino. La reina representa a los pueblos extranjeros que se asombran por la sabiduría divina otorgada a Israel.

    2. ¿Qué importancia tiene el oro y las especias que trae la reina?
    El oro y las especias son símbolos de honor y respeto hacia Salomón. También reflejan la prosperidad del reino y la influencia que Salomón tenía más allá de las fronteras de Israel.

    3. ¿Qué destaca la reacción de la reina de Sabá al ver la sabiduría de Salomón?
    La reacción de la reina refleja que la sabiduría de Salomón era incluso mayor de lo que había escuchado. Ella reconoce la justicia y el favor de Dios sobre Salomón, destacando la grandeza del rey y la conexión entre sabiduría divina y buen gobierno.

    4. ¿Por qué es importante el reconocimiento de la reina hacia Jehová?
    Es importante porque muestra que el testimonio de la bondad y justicia de Dios se estaba extendiendo más allá de Israel, y que las naciones extranjeras también reconocían el poder y la soberanía de Jehová.

    5. ¿Qué revela este pasaje sobre la relación entre riqueza y sabiduría?
    Este pasaje sugiere que la verdadera riqueza, más allá del oro y las posesiones materiales, radica en la sabiduría que proviene de Dios. Salomón era rico en sabiduría y justicia, y esto atrajo no solo bienes materiales, sino también respeto y reconocimiento global.